El hombre es una cuerda tendida entre la bestia y el superhombre, una cuerda por encima de un abismo.
Amo a quien quiere algo superior a él, aunque en el empeño sucumba.
Todo héroe victorioso se cree con derecho a ser audaz.
La mejor manera de ayudar a las personas muy perplejas es alabarlas de una manera muy resuelta.
La sencillez y naturalidad son el supremo y último fin de la cultura.
El que quiera cosechar en la vida felicidad y tranquilidad, no tiene más que desviarse de los caminos que conducen a la cultura superior.
El camino más corto no es el más derecho, sino aquél en que el viento mueve nuestras velas; no obedecer a las reglas de navegación es simple necedad.
El carácter definitivo del hombre es la voluntad; el de la mujer, la sumisión; tal es la ley de los sexos.
Sólo cuando el hombre haya alcanzado el conocimiento de todas las cosas, podrá conocerse a sí mismo, pues las cosas son la frontera del hombre.