La adversidad descubre al alma luces que la prosperidad no llega a percibir.
Los afectos son como rayos; nunca sabes dónde golpean hasta que han caído.
El amor conyugal, mientras dura, es el más fuerte de todos.
El carácter es la fuerza sorda y constante de la voluntad.
Tres cosas necesita el hombre para ser feliz: un libro, un amigo y la bendición de Dios.
No trato de convencer a mi adversario de que está en el error, sino de unirme a él en una verdad más elevada.
La sociedad no es sino un desarrollo de la familia; si el hombre sale corrompido de la familia estará corrompido en la ciudad.
¿Qué es una familia sino el más admirable de los gobiernos?
El carácter es la fuerza sorda y constante de la voluntad.