El amor hallará su camino, aunque sea a través de senderos por donde los lobos no se aventurarían a seguir a su presa.
Dadme la dicha suprema del primer beso de amor.
El corazón del hombre es como el horizonte: una parte del cielo; pero, como el horizonte, cambia noche y día.
¿Qué es la esperanza sin la levadura del miedo?
Apenas son suficientes mil años para formar un estado; pero puede bastar una hora para reducirlo al polvo.
El mejor profeta del futuro es el pasado.
Es dulce el oír cómo ladra el fiel perro que está de guardia y nos da la bienvenida al acercarnos a nuestro hogar; es dulce saber que hay un ojo que nos verá y brillará más a nuestra llegada.
Cuando pensamos que estamos dirigiendo, nos están dirigiendo a nosotros.
En la soledad es cuando estamos menos solos.