Parte de la curación está en la voluntad de sanar.
Si quieres que tu secreto sea guardado, guárdalo tú mismo.
De ningún bien se goza en la posesión sin un compañero.
Si quieres no sentir temor de nada, piensa que todo es terrible.
Forzosamente debe temer a muchos el que es temido por muchos.
Quien pretende llegar a un sitio determinado, emprenda un solo camino y déjese de tantear muchos al mismo tiempo, pues ello no es caminar sino andar de vagabundo.
Debemos hacernos flexibles y no entregarnos con terquedad a las determinaciones que tomamos al pasar a aquéllas a que el azar nos conduce.
El trabajo es el alimento de las almas nobles.
Si quieres someter todas las cosas a ti mismo, sométete primero a la razón.