Que errar en lo menos, no importa, si se acertó en lo principal.
La falsedad tiene alas y vuela, y la verdad la sigue arrastrándose, de modo que cuando la gente se da cuenta del engaño ya es demasiado tarde.
… Merced, que así se han de llamar los favores de las damas.
¡A buscar ventura, que la halla el que se muda!
La firmeza en los amantes es la parte más preciada.
No hay clavo tan fuerte que pueda detener la rueda de la fortuna.
De gente bien nacida es engrandecer los beneficios que recibe.
De gente bien nacida es agradecer los beneficios que recibe.
Para los vencidos, el bien se vuelve en mal y el mal en peor.