El misterio del amor es más profundo que el misterio de la muerte.
El amor comienza por engañarse a sí mismo, y a veces logra engañar al otro.
Los que aman sólo una vez en su vida son realmente los superficiales.
Amarse a sí mismo es el comienzo de una aventura que dura toda la vida.
Hay dos maneras de no amar el arte. Una consiste en no amarle. Otra en amarle razonablemente.
El que no ama el arte en todas las cosas, no lo ama en ninguna, y el que no lo necesita en todas las cosas, no lo necesita en ninguna.
El arte jamás ha de intentar ser popular. El público es el que ha de intentar ser artista.
Los buenos artistas lo entregan todo a su arte, y por consiguiente no tienen ellos mismos nada de interesante.
Para cuantos conocen la historia, la desobediencia es la virtud original del hombre. Mediante la desobediencia se ha realizado el progreso; con la desobediencia y la rebelión.