La desesperación es el medio para quien no tiene ya esperanzas.
Saquemos el valor de nuestra misma desesperación.
Cuando todo se ha perdido, cuando no queda esperanza alguna, la vida es un oprobio y la muerte un deber.
La desesperación es una quimera, esto es lo que la hace tan parecida a la esperanza.
Hay gentes que hasta en la desesperación son ridículas.
Cuando uno pierde la esperanza se vuelve reaccionario.
Seguimos esperando hasta cuando desesperamos.
¿Qué espera tu corazón cuando niega lo que espera con su desesperación?
Muere la esperanza y renace de nuevo; en la juventud la desesperación es completamente imposible.