Mi abuela quiso que yo tuviera una educación; por eso no me envió a la escuela.
No hay más que una educación, y es el ejemplo.
Un hombre educador es el que tiene los amores y los odios juntos.
Un maestro de la verdad, no deja de amonestar. Hacer sabios los rostros ajenos hace a los otros tomar una cara, los hace desarrollarla, les abre los oídos y los ilumina.
La educación nos inculca desde el nacimiento un repertorio de emociones ya hechas; no sólo lo que nos es permitido sentir, sino la manera como se han de sentir las pocas emociones que son permitidas.
Que se eduque a los hijos del labrador y del barrendero como a los del más rico hacendado.
Creo que la instrucción es la parte menor de la educación.
El espíritu de la educación es el conocimiento, no de los hechos, sino de los valores.
No hay gente inadecuada. Todo el mundo está educado; sólo que mucha gente está mal educada.