Que está la eterna inquietud en lo cósmico y humano… el agua mueve el molino y el molino mueve el grano.
Por la inquietud del hombre se conocen los deseos que tiene de ser feliz y dichoso.
La inquietud y el sufrimiento son nuestras penas mayores; las grandes verdades no se descubren sin pena y trabajo.
El placer puro existe: siempre va acompañado de alguna inquietud.
El más inquieto vagabundo acaba por añorar su patria, y encuentra en su choza, junto al pecho de su esposa, rodeado por sus hijos y en sus trabajos para procurarse el talento, la felicidad que en vano buscó por el vasto mundo.
El hombre ha nacido para vivir entre las convulsiones de la inquietud o en la letargia del aburrimiento.
Tantas idas y venidas, / tantas vueltas y revueltas, / quiero, amiga, que me diga: / ¿Son de alguna utilidad?
La inquietud no es un accidente que a unos ocurra y a otros no. Está en la misma esencia de nuestro ser.
Por la inquietud del hombre se conocen los deseos que tiene de ser feliz y dichoso.