No hay mayor caballería que portarse como un hombre de bien.
En cuestión de árboles genealógicos, es mejor andarse por las ramas que atenerse a las raíces.
La nobleza está abolida de hecho, pero no pueden abolirse los recuerdos ni las vanidades.
Siempre vive con grandeza quien hecho a grandeza está.
El ánimo hace al que de cualquier condición le es permitido alzarse sobre Fortuna.
Sed como el árbol del sándalo, que perfuma hasta el hacha que lo corta.
La única aristocracia posible y respetable es la de las personas decentes.
La nobleza no se adquiere al nacer, sino en la vida y, con frecuencia, en la muerte.
La nobleza no se adquiere al nacer, sino en la vida y, con frecuencia, en la muerte.